Invitame un cafecito

Invitame un café en cafecito.app

Vistas a la página totales

49384

jueves, 4 de abril de 2019

Cementerio Maldito (2019): 
-Pet Sematary-

Duración: 101 Minutos
Dirección: Kevin Kölsch (Absence, Starry Eyes, Holidays)
Dennis Widmyer (Absence, Starry Eyes, Holidays)
Guión:  Matt Greenberg
Protagonistas: Jason Clarke
Amy Seimetz (Upstream Color, Alien: Covenant, Wild Nights with Emily)
John Litgow

Ficha en IMDb 
Ficha en Wikipedia


La segunda adaptación de la historia homónima de Stephen King, llega pasados treinta años de la primera, aquella dirigida por Mary Lambert. Se baraja la posibilidad de una prequela de acuerdo a la performance de taquilla.


Leyendo sobre la adaptación de Mary Lambert, me parcaté del hecho que fue bastante mal recibida por la crítica en su tiempo, lo que sin embargo no cristalizó en la cantidad de público que convocó -casi quintuplicó su presupuesto en taquilla-. La versión de este año, en cambio, parece tener mejor recepción de la prensa -aunque esperaré con curiosidad la crítica de mis colegas argentines-: esto poniéndolo en relación con puntajes de Metacritic, IMDb y Rotten Tomatoes.
Tal cuestión, me hace sentir un poco solitario respecto a mi percepción: claramente yo percibí ambas películas al revés.
La cinta de Kölsh y Widmyer parece libremente basada o inspirada en la novela de Stephen King. Concedamos -solo en esta oración-, que quizás fueran necesarios los miles de cambios argumentales respecto al libro y la película anterior, por una cuestión de dinamismo o diferenciación. Aún así, por ejemplo, resulta completamente inentendible la modificación de la relación afectuosa entre Lois y Judd por una áspera, cuando la primera oración del libro dice lo siguiente:
"Louis Creed, que se quedó sin padre a los tres años (...) no esperaba encontrar a un padre a los treinta y tantos años, pero eso fue exactamente lo que ocurrió, aunque (...) le llamaba amigo."
Claro que los cambios argumentales -aunque uno de cada seis sea ingenioso- resultan no sólo ridículos, sino también bizarros y poco coherentes.


Si hablamos de Judd, también cambia completamente el personaje: ahora es un viejo malhumorado no muy bien interpretado por un, sin embargo, excusable Litgow. Uno de los pocos puntos en común de las dos películas son las malas actuaciones, pero en la primera, esta cuestión exceptúa el trabajo del experimentado actor Fred Gwynne como Judd Crandall.
Dejando estas cuestiones de lado, encontramos una historia demasiado rebuscada, y un efectismo exagerado. Tratando de encontrar el vaso medio lleno, podemos decir que por momentos el efectismo logra cierta tensión, y a nivel visual tanto la fotografía (Laurie Rose) como los efectos visuales tienen un buen desarrollo.


La innecesaria segunda adaptación del libro de King, podría ser atractiva para las personas que no tienen interés ni por la novela, ni por la primera puesta en escena cinematográfica, o quizás como película de terror completamente independiente de ambas. Este humilde espectador preferiría ser enterrado en el Cementerio Micmac, antes de tener que ver la cinta de nuevo, o su hipótetica precuela.

Mi Calificación: 3,50 (tres y medio) Mala



No hay comentarios.:

Publicar un comentario