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jueves, 10 de mayo de 2018

Star Wars: Darth Vader, sujeto moral (Parte III)

La última parte del artículo, donde virtualmente muere Anakin -eventualmente renaciendo-, y nace Darth Vader. Aquí analizaré los dos encuentros con su hijo Luke, y los puntos comunes que tienen ambos. Para luego concluir si las acciones finales del personaje lo llevan a buen puerto y analizar si deja algún interrogante para el desarrollo de la novena película. 


Vader es recatado con heridas graves por Darth Sidious, y al preguntarle por Padmé, este le dice que fue su ira la que la mató. Lo cual genera en él un lamento legendario, y una ruptura en su espíritu, quizás un reconocimiento que la ira previamente había evitado. Este relato de Sidious no termina de ser completamente verídico, de todas formas. Ya que mientras ella está en el hospital el droide de cuidado médico informa que biológicamente no presenta ningún problema, pero igualmente muere. Se puede decir que Padmé pierde la voluntad de vivir, y muere por su corazón roto. Su amado trazó un sendero que ella no puede seguir, parafraseando lo que le dice a Anakin en Geonosis. El diálogo entre ellos dos es similar al que tiene Ben Solo (Kylo Ren) con Rey, y por qué no al que tiene Vader con Luke. En estos casos se propone gobernar la galaxia junto a la persona seducida, pero da cuenta del nivel de ego que presenta quien hace la propuesta y cierto delirio de grandeza.

En la última parte de la III película vemos a Vader en su
particular vestimenta, y entendemos que el casco es fundamental
para mantener sus signos vitales estables.
Luego de los hechos de la tercera entrega, y hasta la quinta, poco sabemos de los vínculos de Vader. En la quinta película está determinado a buscar a Luke, y lo encuentra. En este encuentro le corta una mano, y le confiesa ser su padre. El tópico de la mano cortada se repite tres veces en la película: a Anakin le corta la mano Dooku, Vader le corta la mano a Luke, y finalmente Luke le corta la mano mecánica a Vader. Éstas mutilaciones son indicios de su vínculo familiar y cierta similaridad en sus destinos. De hecho, con Vader agonizante, Luke se percata de que la mano cortada de su padre tiene tendones mecánicos. Posteriormente en la VII nos daremos cuenta que Rey encuentra a Luke porque se muestra su mano robótica entre otras cosas.
Vemos a Vader (entre el episodio IV y V) generalmente accionando -en la IV mata a su mentor, Obi-Wan, y tortura a su hija, Leia-, siempre fiel al emperador, y asesinando a algunos de sus servidores, cuando los planes no salen como esperaba. En la sexta película parece que todas las acciones se desarrollan respecto a un futuro encuentro decisivo entre Luke y Vader. El primero creyendo fervientemente que su padre puede ser transformado, el segundo seguro de poder convertir a su hijo a lado oscuro y luego duditativo.
 "Luke, you do not yet realize your importance. You have only begun to discover your power.
Join me, and I will complete your training.
With our combined strength, we can end this destructive conflict and bring order to the galaxy." Así quiere Vader
seducir a su hijo hacia el lado oscuro de la fuerza, posteriormente diciéndole que él es su padre.
La realidad del encuentro es que Vader entrega a Luke a Darth Sidious, tal como hiciera Kylo Ren con Rey. Sidious como Snoke, subestiman a sus aprendices y los manipulan. Claro que el principal problema respecto a Vader es que Sidious lo toma como descartable, y en la octava película, quien mata a Snoke es Rey, mientras que en la VI es Vader quien mata a Sidious.
Nuestro personaje parece encontrarse nuevamente en la situación que vivió con Mace Windu y Palpatine. Hay una persona que va a morir si él no acciona, en este caso su hijo -quien reconoce ser un Jedi, como su padre-. Todo parece perdido, Luke así lo considera, mientras vemos a Vader lentamente acercarse a Sidious. Cuando está cerca la muerte de su hijo, él hace gala de una fuerza herculínea y levanta en el aire a su maestro y lo tira hacia el vacío.

El padre llevando a su hijo con el emperador. Hasta aquí se lo ve
muy sereno a Vader, y sin dudas respecto a lo que tiene que hacer.
Esta acción lo deja en estado crítico a quien podría decirse que volvió a ser Anakin. Le pide a su hijo que le saque su casco -lo que producirá su muerte- para verlo con sus propios ojos, sabiendo que con tal acto podrá irse en paz. Le pide que le diga a su hermana que su juicio fue correcto respecto a él. En esta acción de salvataje y en su lecho de muerte vuelve el Annie desinteresado que ayuda a extraños, y cuyo amor por Padmé es entrañable. Tal como un pecador que a último momento se arrepiente de su vida y gana así el reino de los cielos, luego lo veremos joven, junto a Yoda y a Obi-Wan en una visión de Luke. El arrepentimiento parece ser el final más necesario de las dos trilogías, por su carácter catártico y reivindicativo de un personaje lleno de tragedias y con pocos momentos felices. Lo que para concluir nos plantea un interrogante: si Vader se arrepintió, ¿podrá hacer lo mismo Kylo Ren?
La escena más triste y probablemente más bella de las dos trilogías. Padre e hijo
se miran a los ojos, y descubrimos cierto amor de Vader hacia sus dos hijos. 

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